Uno de los emprendimientos más aventurados y locos de todos los tiempos ha sido, sin lugar a dudas, el querer dedicarse a escribir. Desde Homero hasta Gabriel GarcÃa Márquez, los más grandes escritores de la historia se han encontrado con situaciones realmente complicadas de sortear; dificultades a las que se sobrepusieron con mucho esfuerzo, dedicación, persistencia, resiliencia y no pocas privaciones; triunfando y siendo acogidos por la sociedad que poco antes los rechazaba por dementes.
A pesar del sacrificio, las recompensas valen la pena. Porque la mayor lucha que debe vivir el escritor, no es contra aquellos que le humillan, desprecian o se burlan, sino contra sà mismo: retarse hasta lÃmites impensables. Aquellos que creen en esto y se exigen son los que, con mucha paciencia, alcanzan sus mayores sueños.Leer, leer y leer
Como si no hubiese mañana, trata de leer aquello que caiga en tus manos. No importa si es mala literatura: Asà sabrás qué no debes hacer. Busca, además, a los grandes maestros de la narrativa de todos los tiempos. Una legión cada vez más numerosa debe sumarse a tu artillerÃa libresca.
El dinero, que antes podÃa ser un impedimento para comprar sus obras, ya no es problema gracias a las múltiples alternativas que ofrece internet para obtener préstamos rápidos en asnef, para comprar ese libro ya mismo antes de que alguien más se lo lleve.Créate una rutina
Dedica al menos una hora al dÃa a la escritura. Escribe sin orden ni concierto: No necesariamente debe ser algo planificado, puede ser aquello que se te venga a la mente. Ideas sueltas, frases que hayas leÃdo y recuerdes, cualquier cosa que desees escribir sirve para crear tu rutina de escritura.
Busca una fuente de financiamiento: Sea para sustentarte mientras escribes, o para publicar tus obras, lo ideal es que tengas cómo defenderte económicamente si quieres ver tu sueño realizado de escritor. Procura buscar préstamos inmediatos de las muchas opciones que ofrece el internet, y no dejes que el dinero te quite el sueño.¿Copiar estilos?
Borges decÃa que la escritura tenÃa algo de memoria y algo de olvido. Quiroga recomendaba, en su decálogo del perfecto cuentista, no imitar, y hacerlo si la influencia era muy grande e inevitable. Vargas Llosa, por su parte, asegura que el éxito de un buen escritor radica en no copiar, sino en encontrar su propio estilo. Aunque esto lleve tiempo, generrá frutos con la constancia.